Compiladas por el proyecto de migrantes desaparecidos de la OIM, las únicas cifras disponibles muestran que casi siete mil 500 personas perdieron la vida desde 2014, entre ellas, más de dos mil en el desierto del Sahara.
A pesar de seis años de trabajo de la organización, aún no existe un registro exhaustivo del número de decesos, aseguró la fuente tras una conferencia en Senegal, con la participación de expertos y representantes de organizaciones internacionales.
Cientos de muertos adicionales probablemente no se reportan ni se cuentan, lo que indica la invisibilidad de los migrantes irregulares y la indiferencia que el mundo tiene por este tema, lamentó el director del Centro de Análisis de Datos de Migración Global, Frank Laczko.
De acuerdo con la fuente, alrededor de 17 mil hombres, mujeres y niños perecieron en las aguas del mar Mediterráneo, la ruta migratoria conocida más letal del mundo; sin embargo, los restos de dos tercios de esas víctimas siguen desaparecidos, por lo que es casi imposible identificarlos.