MOVILIDAD HUMANA LUGAR TEOLÓGICO

El presente volumen dedicado a la migración como lugar
teológico (locus theologicus) es un ejercicio de parresía como la
capacidad de hablar valientemente en el sentido Foucaultiano, y
de dar una palabra franca contra un monolingüismo despreciativo
de la migración como lo han sido los discursos del presidente
Donald Trump. Colocar la migración como uno de los principales
lugares de la revelación de Dios en la historia contemporánea nos
conduce a reconocer al mundo y sus crisis como lo nombrara en
su momento Sallie Mc Fague: el mundo cuerpo de Dios, un cuerpo
nómada, un cuerpo migrante y un cuerpo herido que necesita ser
sanado y reconstruido.

 

DOI: doi.org/10.61301/978-65-85775-28-1.2025.05.248p

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