Venezolanas obligadas a prostituirse en Cartagena, niños indígenas ecuatorianos llevados a mendigar a Cali, mujeres colombianas explotadas sexualmente en China o Chile, colombianos en trabajos forzados en Argentina: para la ONU, Colombia es un país de origen, tránsito y destino para el trato de personas.
Bogotá - Venezolanas obligadas a prostituirse en Cartagena, niños indígenas ecuatorianos llevados a mendigar a Cali, mujeres colombianas explotadas sexualmente en China o Chile, colombianos en trabajos forzados en Argentina: para la ONU, Colombia es un país de origen, tránsito y destino para el trato de personas.
"El tratamiento se concentra cada vez más en la misma región, en el mismo continente", declaró a la AFP Bo Mathiasen, representante en Colombia de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), al comentar el último informe sobre esta lacra.
Según el informe, presentado en diciembre en Nueva York, entre 2012 y 2014 se detectaron 63.251 víctimas de tratamiento en 106 países.
La ONU está preocupada por este negocio ilícito "muy lucrativo", que recauda unos 32.000 millones de dólares al año en todo el mundo, estimó el funcionario, y subrayó que casi un tercio de las víctimas en todo el mundo son menores de edad.
En América Central y el Caribe, sin embargo, el porcentaje de víctimas infantiles es aún mayor, con 62 y 64% respectivamente, señaló.
Aunque el estudio de la ONUDD identifica a los grupos armados como el principal factor de riesgo, al explotar sexualmente a niñas y mujeres y obligar a niños y hombres a ser combatientes, esta situación no se da tanto en Colombia, asolada desde hace medio siglo por una feroz violencia fratricida.
"Hay algunas asociaciones, pero en general es un delito independiente, tiene su propia dinámica. Colombia no tiene necesariamente más víctimas del delito de trata debido al conflicto interno", dijo Mathiasen.
Para los expertos, en Colombia la mayor vulnerabilidad al narcotráfico se da en las regiones de influencia de las bandas criminales dedicadas al narcotráfico y la minería ilegal. "El crimen organizado añade tratamiento a su negocio", dijo Mathiasen.
De la Ruta del Café a China
En Colombia, las zonas de gran movimiento debido a los flujos migratorios internos o externos, la desigualdad económica y el abandono escolar aumentan la vulnerabilidad a la trata, explicó Carlos Andrés Pérez, coordinador del programa de la ONUDD sobre trata de personas y tráfico de migrantes en el país.
Pérez citó un estudio de la Universidad de La Sabana, que estimó que una red podría invertir unos 6.000 dólares en llevar a una mujer colombiana del departamento de Risaralda, en pleno Eje Cafetero, a China, y en tres meses de explotación sexual obtener 60.000 dólares.
Los informes de la Oficina de las Naciones Unidas y del Ministerio del Interior de Colombia muestran un aumento de los casos en los últimos años, pero esto no significa necesariamente que el fenómeno esté creciendo, sino que se están registrando más casos, dijo el experto, aunque subrayó que se están detectando más casos a nivel nacional.
"En años anteriores el tratamiento estaba vinculado a nacionales trasladados a otros continentes, pero el refuerzo de los controles ha provocado un aumento de los casos internos", dijo, y aclaró que por cada caso documentado se calcula que se desconocen 20 más.
Según cifras oficiales citadas por la ONU, en 2015 se registraron en Colombia 73 víctimas de trata de personas, en su mayoría con fines de explotación sexual, trabajo forzoso, mendicidad y matrimonio servil. La mayoría eran mujeres (86%).
El informe identificó a los departamentos de Valle del Cauca (occidente); Cundinamarca (centro), donde está la capital Bogotá; Caldas y Risaralda (centro, Eje Cafetero); y Antioquia (noroccidente), donde está Medellín, la segunda ciudad del país, "como territorios frágiles para la captura de víctimas", según datos de enero de 2015 a junio de 2016.
Los principales destinos de explotación extranjera de las víctimas colombianas en 2015 fueron República Dominicana, China, Chile, Ecuador, México, Argentina, Panamá, Paraguay y Emiratos Árabes Unidos. (I)
Fuente: El Universo
